Entre los dedos con la arena vas vos

And every time I try to pick it up
Like falling sand
As fast as I pick it up
It runs away through my clutching hands

No es novedad pero conviene aclararlo, señalar que resulta equiprobable que haga las valijas y se vaya sin mirar atrás, sin cerrar la puerta, a que llegue sin aviso y sin ser llamado, con los bolsillos plenos de confeti, mapas y buenos augurios. Sabe desde hace meses que no logra más que hacerse trampas al solitario y que en el fondo lo que más le duele es la añoranza de un sueño perdido. Los valores están de saldos, suele murmurarse al amparo de un buen vino o cabeceando afirmativamente en medio de una charla intrascendente. Se viste a diario de asfalkote. Intuye que no le queda tan mal, que los pingüinos y los entierros son así, y que está bien que se desgajen en silencio. No le importan ni lloviznas, ni vendas, ni la peor arena en el mejor zapato. Si Kirlian conversara con él, se enteraría de que el tipo está de vuelta de casi todo. Si el tipo fuera sincero, confesaría que no fue a ningún lado, que en realidad no hizo sino vivir en un sueño que no era otra cosa que una burbuja más o menos porosa, una ilusión de adolescente nacida allá a comienzos del ’92, cuando todavía la inocencia decía presente, cuando los valores aún no estaban de saldos, cuando las valijas y las despedidas eran sólo una pesadilla acuarelosa, una película nunca vista, el libro que ninguno de los dos jamás había abierto. No es novedad pero conviene aclararlo.
Javier CoutoJavier Couto (Montevideo, 1974) es narrador. En 2010 obtuvo una mención de honor por Voces (cuentos) en el XVII Premio Nacional de Narrativa “Narradores de la Banda Oriental”. Su novela Thot fue finalista del Premio Minotauro 2013 (Editorial Planeta). En 2014 obtuvo una mención de honor con su libro de cuentos Del otro lado, en el Concurso Literario Juan Carlos Onetti 2014 y la primera mención en el Concurso Internacional de cuentos Julio Cortázar.

1 comentario:

Rodia dijo...

¿por qué será que siempre la inocencia está presente en el pasado? Me pregunto si dentro de, ponele, diez años, nos consideraremos inocentes viendo desde allá este acá. Para mí que sí.