Doctores

Aunque ya poco me extraña, vale la pena el asombro. No es un impacto como el de ayer (un padre colgó a sus dos hijos, cuatro y siete años, y luego se colgó él mismo) sino de otro orden. A ciertos buenos doctores se les ha ocurrido ocurrente desplegar su imaginación en un congreso titulado (me permito todas las traducciones del caso) "2da jornada cogni-psi de la Salpêtrière". Estos señores han de haber encontrado gracioso, dada la crisis actual, dar un perfil económicofinanciero a sus títulos de ponencia. Por un motivo que se me escapa, el título de la jornada es "La depresión: ¿una crisis del ahorro cerebral?". Los títulos de las ponencias son como sigue:

- El suicidio: ¿decisión de crisis o crisis de decisión?
- Endeudamiento sináptico y saldo deudor, dos elementos clave en período de depresión
- La tristeza: una traba a la productividad
- El duelo: una inversión dolorosa

Tan vivos se creen que cuando busco, en francés, endeudamiento sináptico, google me trae sólo dos referencias, ambas a la dichosa jornada.

Sí, lo sé, parece joda.

Pero no lo es.
Javier CoutoJavier Couto (Montevideo, 1974) es narrador. En 2010 obtuvo una mención de honor por Voces (cuentos) en el XVII Premio Nacional de Narrativa “Narradores de la Banda Oriental”. Su novela Thot fue finalista del Premio Minotauro 2013 (Editorial Planeta). En 2014 obtuvo una mención de honor con su libro de cuentos Del otro lado, en el Concurso Literario Juan Carlos Onetti 2014 y la primera mención en el Concurso Internacional de cuentos Julio Cortázar.

3 comentarios:

sokon m dijo...

jaaaaajaajaja :-)

parece que el psicoanálisis se reconcilió con Marx de alguna forma grotesca ..

a lo mejor los títulos son humorísticos pero el desarrollo es serio, no?

Rodia dijo...

No entiendo si te ofende, jumper. Celebro el ya poco me extraña. Estamos en la era de la boludez.

Javier Couto dijo...

Dado que es en la Salpêtrière y que lo organiza alguien del CNRS, asumo que el contenido de las presentaciones es serio, Sokón. Eso es lo peor.

Y no me ofende, jumper, me parece de pésimo gusto. Si tuviera que dar un adjetivo, diría ramplón, tal vez superficial o simplemente vulgar. La Salpêtrière me queda relativamente cerca y vivo a pocas cuadras del Sainte Anne, que es como el Vilardebó de acá. Es habitual ver por la calle (hablo en serio) a gente que se escapó del psiquiátrico. Es triste. Ver a gente deprimida es triste también. La jornada trata de la depresión. En fin, connect the dots, jumper.