Girondo y sus personalidades

Mientras en un plano mental paralelo three-haired R2D2 se dedicaba a fabricar ya no sé qué, ayer, conversando con una divinidad egipcia (a veces las cosas se dan así y uno no elige) surgió como tema la nueva película de Eliseo Subiela. De ahí a las anteriores, hasta llegar a la historia de Oliverio (Oliveira, dijo?). De eso a Girondo y al famoso espantapájaros, no se me importa un pito, los senos como magnolias, el aliento, la nariz... Y sin embargo, el que más recuerdo de Girondo —y que viene al caso— habla de sus múltiples personalidades y termina de esta manera (un poco cursi y con alguna preposición que falta):

"Mi vida resulta así una preñez de posibilidades que no se realizan nunca, una explosión de fuerzas encontradas que se entrechocan y se destruyen mutuamente. El hecho de tomar la menor determinación me cuesta un tal cúmulo de dificultades; antes de cometer el acto más insignificante necesito poner tantas personalidades de acuerdo, que prefiero renunciar a cualquier cosa y esperar que se extenúen discutiendo lo que han de hacer con mi persona, para tener, al menos, la satisfacción de mandarlas a todas juntas a la mierda."

En fin. Cambiando de perfil (expresión de retratista exhaustivo), desde hace días me encuentro repitiendo un sintagma nominal que me parece excelente: "mixtura de alta combustión". Es de "La argentinidad al palo", de la Bersuit. Pueden ser casualidades u otras rarezas que pasan, diría Silvio, pero sinceramente me parece excelente.
Javier CoutoJavier Couto (Montevideo, 1974) es narrador. En 2010 obtuvo una mención de honor por Voces (cuentos) en el XVII Premio Nacional de Narrativa “Narradores de la Banda Oriental”. Su novela Thot fue finalista del Premio Minotauro 2013 (Editorial Planeta). En 2014 obtuvo una mención de honor con su libro de cuentos Del otro lado, en el Concurso Literario Juan Carlos Onetti 2014 y la primera mención en el Concurso Internacional de cuentos Julio Cortázar.

2 comentarios:

Javier Couto dijo...

Si soy amigo del mar y de todo cuanto es de especie marina...

Javier Couto dijo...

Y por qué no el clásico:

Yo quiero tener un millón de amigos y así más fuerte poder cantar...