Reuniones

Salgo arrastrándome de una reunión repleta de lagartijas, perezosos y hasta un mellado que hizo una presentación oral, un muchacho muy, muy voluntarioso pero demasiado muy.

Y pienso en lo curioso del final de la reunión. La directora del proyecto que me llevó hasta la ominosa sala habla de los somníferos y se propone responder a la pregunta siguiente: ¿cuál fue el primer somnífero? Somníferos, oh coincidencia, me digo bostezando. Alguien atribuye su invención a Hipócrates. “El primer médico” repite dos o tres veces el mamaliano terrestre con un aire de erudito entarimado que te la debo. Pero el sayo, luego de una búsqueda en Internet, le cae finalmente al romano Celsus y se ven caras de aprobación en la hinchada. Dudas varias porque los egipcios, ya se sabe, pero la hinchada se conforma con Celsus, posiblemente por la hora –pasado el mediodía– y el hambre. Se cita en voz alta el pasaje encontrado, en el que se refiere a la mandrágora.

Mandrágora me lleva inevitablemente a Sabina y este a “Yo me bajo en Atocha”. Comienzo a escuchar mentalmente la canción, lo cual me alivia de la fauna existente porque justo resulta que entre lagartijas y perezosos había una cacatúa a la que se le ocurre activarse a último momento, cuando ya todos miramos la puerta de salida con cariño.

Pasado el trance, llega la clausura: momento de atribuir tareas. Entonces, misteriosamente, todos nos convertimos en perfectos contorsionistas en el antiguo juego de quitarle cierta parte del cuerpo a la jeringa. Haciendo un rápido cálculo mental, me digo que es una escena que debo de haber vivido, por lo menos, unas trescientas veces. La idea de computar en trescientas el número de reuniones de este estilo me genera un malestar que sólo logro aplacar subiéndole el volumen a Sabina.

Ya no sueña aquel niño que soñó que escribía: corazón de María no me dejes así...
Javier CoutoJavier Couto (Montevideo, 1974) es narrador. En 2010 obtuvo una mención de honor por Voces (cuentos) en el XVII Premio Nacional de Narrativa “Narradores de la Banda Oriental”. Su novela Thot fue finalista del Premio Minotauro 2013 (Editorial Planeta). En 2014 obtuvo una mención de honor con su libro de cuentos Del otro lado, en el Concurso Literario Juan Carlos Onetti 2014 y la primera mención en el Concurso Internacional de cuentos Julio Cortázar.

2 comentarios:

Zeta dijo...

Ah!!! Mandragora officinalis!!! Se me hace agua la hipófisis.

Circe dijo...

Siento el mismo aprecio que vos a las reuniones en todas sus variedades... de planifiación, de evaluación, de trabajo... uf.