This is absolutely disgusting

A vos que estás del otro lado, ¿no te parece que en el fondo el pibe algo de razón tiene? Que es jodido que, aunque intente evitarlo, en las reuniones las imágenes le caigan encima como excremento de murciélago, un guano rojizo y tibio, repulsivo y al mismo tiempo inevitable mancha en el charco de materia gris. El proyecto necesita un informe de avance, la conclusión nace como un hongo y está clarísimo y de pronto una mano gira y es una peluca de mimbre, curiosa imagen por su inutilidad, monumento de abejas condenado de antemano al vacío, justo ahora que lo que preocupa es armar los puntos a tratar en el informe. Pestañea rápidamente, se acomoda y se pregunta qué hace ahí a esa hora temprana y criminal en la que a nadie le interesa nada, mucho menos si él estornuda y le duele el esternón, o rememora el quinto encefalograma cuando niño, la dosis de comitoína, la buena cucharada de litio, vamos a tener que dividir, muchachos, que divide and conquer y la unión hace la fuerza, color de sangre tiene el fuego, color negro tiene el volcán, carajo. De su asombro nace un gesto involuntario que le deja el pescuezo como un anillo de moebius mientras se vuelve a preguntar qué mierda está haciendo ahí, con ese rostro imposiblemente Laika, orejas bajas, bigotes, lágrimas de aserrín y el santo torpedo escapándose por el culo del mundo. Pero es así, fácil ceder a las soluciones viscosas, a Torquemada en pijama en el Museo de la Tortura en Amsterdam ahora que lo mejor va a ser que la introducción la redacten los cuatro grupos consensuadamente, oh la vache, venganzas chez Dumas, pas le chat, quoi, Dumas the cat en aceite hirviendo nos hace saltar, recuerdos como penachos o restos de vino en el fondo de la copa, pero cómo que tiene que redactar todo eso, tous ces enculés, merde, Zitarrosa sinfónico, le tocó una sección entera pero a no preocuparse que hay bastante material escrito, raw material, claro, días asegurados de gárgaras de letra impresa, la misma letra que hará hincapié en la metodología y a no olvidar las recomendaciones, gente, que para eso nos gatillan. Vals de marionetas entonces, sus años de guitarra y Sinópoli, manotones de pulpo, de ahogado, de púgil ágil grácil y frágil, monólogos con abundante CH3.CH2-OH, cuántos naufragios tantos, bípedos mamalianos terrestres, anfibios frustrados, duchas frías de mierda líquida y vamos… ¿cómo vamos con la redirección del proyecto que se parece a la mano de abejas acariciando un gargajo de mármol? Es gratuito expresarse así, es mejor acariciar gamuza, le da lo mismo, hoy sí que se caga en todo porque no sólo durmió mal sino que está cabreado y punto, duda en atestiguar con sangre en cuero de cabra y pasarse para el otro bando, silbarse bajito un réquiem en re menor, lacrimosa y agnus dei, tú que quitas el pecado del mundo no te olvides de armar bien la bibliografía, referí que eso realza, negro, las masas se programan, rancunier del carajo, contesta mentalmente el pibe, Linda Lovelace de la tercera edad (pero se lo dice a él mismo), pajero de cuarta que todavía soñás con la gloriosa muerte y que sabías de antemano que alimentabas una tormenta que iba a terminar escupiendo recuerdos a corto plazo, entripados y ojeras en el espejo. Y ahora cae una bacante, una hora tarde, miel y leche, inclinada, cuadrúpeda, besándose las rodillas, ajustada como un tornillo, cómo pueden permitir esto, imposible concentrarse, parpadea otra vez, fosfenos, lagañas duras como grumos, la pieza comienza a dibujarse, recuerdos que vuelven y se disuelven en la resaca, el sol que lastima y el café con leche enfriándose en la taza, una canción, little fish big fish swimming in the water, sentir en el centro mismo del estómago un vacío de ciudad, de amor, de amigos, de todo, de mundo, antimateria revuelta y una oreja festejada por algún hijo de puta afortunadamente desconocido, sacarse el sombrero ante los ciclos espumosos a las 2:22 am, los dos espejos planos paralelos enfrentados… ¿Y qué pasa si la otra gente no está de acuerdo con el contenido del informe? Naaada, no pasa naaada, se dice desde la cueva y pensando en mandar un mensaje en cuentagotas, un resumen gestual, justo hoy que l’amour est anéanti y que sólo quiere abanderarse con los cínicos, revivirlos, rajarse un pedo como el Perro en cualquier lado, cagar en público, ser… ¿conciencia social?, se cuestiona levemente justo cuando alguien propone que se incluyan anexos técnicos, pero bien, bien técnicos, con diagramas y numeritos, chirimbolejos llamativos y que aseguren, che, hay que asegurar, poder palpar, seamos tangibles, les gars, que somos profesionales… ¿conciencia social?, pequeñas cuentas a pagar, facturas que nos pasó la raza al nacer y que se llaman buena educación, piensa bastante convencido en el momento exacto en que empieza a ser él mismo o alguien que se parece bastante a él, sí, ahora sí, un golem semierguido y no tan soñoliento, torpe, vagamente inquieto, agonía balcánica en la NASDAQ, Bregovic y Forbes, Mano Negra incendiando la estación de AFE, el borracho apodado El Arquitecto de la Torre de Pisa que se salvó de todas las cañitas voladoras, y se empieza a sentir mejor porque no está tan mal la idea que acaban de lanzar, le parece razonable porque la ética siempre debería llevar a recomendaciones de largo aliento y de ese tenor y quizá altisonantes pero el honor y la decencia, es sabido, razonable, tan razonable como mirar hacia arriba y constatar que los murciélagos le sonríen impersonalmente y él recuerda a Aristóteles y los diálogos socráticos y que no hay fenómenos morales sino interpretaciones morales de los fenómenos y quiere pensar algo más pero ya no sabe muy bien qué pensar y se dice que lo mejor sería acercarse a la bacante que tiene cara de vacante o hacerse a un costado porque a esa hora mejor no hablar y seguir el consejo salomónico o concentrarse en lo que le están diciendo y dejarse de joder un poco porque la reunión ya termina, por suerte ya termina pero mantener la figura y pasar la hoja y prestar atención y… y… y… siempre y… carajo y murciélagos y plop… merde alors ! merde !
Javier CoutoJavier Couto (Montevideo, 1974) es narrador. En 2010 obtuvo una mención de honor por Voces (cuentos) en el XVII Premio Nacional de Narrativa “Narradores de la Banda Oriental”. Su novela Thot fue finalista del Premio Minotauro 2013 (Editorial Planeta). En 2014 obtuvo una mención de honor con su libro de cuentos Del otro lado, en el Concurso Literario Juan Carlos Onetti 2014 y la primera mención en el Concurso Internacional de cuentos Julio Cortázar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No se preocupe no es al único que lo visitan las imágenes